"Con nosotros es posible... que todo siga igual que hace 20 años"
Al partido en el poder a nivel nacional, en este caso el PSOE, le explotó la crisis en la cara. El motor económico había sido hasta la fecha la construcción, todos sabían que había una burbuja inmobiliaria, que acabaría por explotar o desinflarse. Lo que no se preveía era que acontecimientos de carácter mundial precipitaran el fin de la era del ladrillo. Ninguno de los gobiernos que se turnaron dirigiendo el país querían prescindir de los incuestionables beneficios económicos que recibía la sociedad gracias al empuje de la construcción. Cambiar el modelo económico de un país no se hace de la noche a la mañana ni los resultados son inmediatos. La crisis mundial golpeó en la cara al gobierno del PSOE igual que le hubiera golpeado al del PP, sin mayores miramientos. El ex presidente de la Reserva Federal (FED) de EE.UU., Alan Greenspan que fue durante buena parte de sus dos décadas al frente de la Reserva Federal idolatrado como uno de los grandes oráculos económicos del mundo, ahora no es considerado tal gurú señalando sus medidas como incentivo para prácticas especulativas de alto riesgo.
La crisis explotó a todos los gobiernos, fueran del signo que fueran, en una recesión sin precedentes para la cual no había manual de instrucciones, con el agravante para España de que su modelo económico estaba en sus últimas etapas de vida que se consumieron de forma precipitada sin que se hubiera encontrado repuesto de dicho modelo económico.
El gobierno ha hecho literalmente "lo que ha podido" pues los economistas no aseguraban que hubiera receta magistral para afrontar la situación y estoy seguro de que si otro signo estuviera en el poder sus actuaciones, más afortunadas o no, se resumirían en la misma frase. Sin embargo la oposición ha establecido la táctica de que "cuanto peor, mejor" criticando todas y cada una de las medidas adoptadas pero sin aportar soluciones aplicables. Si el barco se hunde en vez de ayudar a achicar agua, es mejor hacer agujeros en el casco para que el trabajo del capitán quede devaluado, sin darse cuenta de que si el barco se hunde, nos ahogamos todos.
De todas maneras el objeto de estas líneas no es analizar la situación mundial o nacional, o quizá sí. Me ha llamado la atención de una forma importante el artículo de El Norte de Castilla cuyo enlace aparece al inicio de este artículo en el que se jalea la buena gestión de los gobiernos del partido PP a nivel local, provincial y autonómico.
A nivel local nuestro alcalde, Javier León de la Riva, ofreció, en su momento, una alternativa de gobierno a la gestión de su antecesor, Tomás Rodríguez Bolaños que después de 16 años en la alcaldía comenzó a notar el desgaste en el poder. Javier León de la Riva ha hecho grandes cosas por la ciudad, al igual que lo hizo Bolaños, sin embargo sus últimos años de gobierno se basan en la confrontación, y en actuaciones que suelen acabar en los tribunales y que pierde, con el consiguiente gasto para las arcas municipales que al final, llenamos todos. El resultado de trabajar siempre muy al límite de la ley es que algunas veces se incumple conociendo los periódicos los últimos fallos judiciales por desfavorables para el ayuntamiento. Sería interesante hacer el cálculo del coste de estos desatinos para los vallisoletanos y enumerar el número de proyectos pendientes por falta de los fondos invertidos en estos desaguisados.
"Hay que estar orgulloso de tener el valor de proclamar que somos un modelo para dirigir un país."
A nivel autonómico parece increíble que se erijan en modelo de gestión, cuando tras más de 20 años gobernando los problemas de nuestra comunidad se han acentuado y Castilla y León no se encuentra precisamente entre las comunidades autónomas más punteras. Exportar el modelo de gestión que se ha perpetuado en Castilla y León durante más de 20 años es plantear la atonía a nivel nacional, el confiar en el destino y el tiempo que todo lo hace y todo lo cura.
El gobierno regional es el jugador que ha pasado toda la temporada en el banquillo y que se jacta de que gracias a él su equipo ha ganado la liga. El estado de las autonomías y la consiguiente desconcentración de competencias tiene como resultado el que los problemas y las soluciones son de todos. El margen de maniobra del Estado es limitado porque parte de su poder de decisión está en manos de las autonomías y estas son tan responsables para aportar y poner en marcha soluciones que no pueden esperar a que papá estado actúe cruzados de brazos.
El gobierno de Zapatero impulsó el Plan E, que sin dejar de ser un parche ha permitido ofrecer un balón de oxígeno a muchas familias y empresas, además de otra serie de medidas con el fin de reactivar la economía pero sobre todo no abandonar a las clases sociales más desfavorecidas en estos momentos tan difíciles. La Junta de Castilla y León...
Su lema "Con nosotros es posible" al ser analizado comprobamos que está carente de su objeto o complemento directo que animo a completar.
"Con nosotros es posible... quedarnos como estamos"
" Con nosotros es posible...aguantar quietos en la mata, hasta que esto se solucione"
"Con nosotros es posible...que esto vaya a peor"
"Con nosotros es posible... que todo siga igual que hace 20 años"
"Con nosotros es posible..que Castilla y León se quede desierta"
Hay que estar orgulloso de tener el valor de proclamar que somos un modelo para dirigir un país.